viernes, 9 de julio de 2010

En un instante

A diestra y siniestra moviendo un café
en mi boca un cigarrillo consumiéndose,
al escuchar tu voz la cabeza alcé
vislumbrando tu figra sentándose,

en ese justo momento te pregunté
tu voz quebrada y nerviosa responde,
entrando en un hostal sin ser nadie
y nadie eras desnuda ante mi,

yo igualado observando tu figura
ahora una voz cálida y tranquila,
al oído me susurraba una travesura

yo no soy un niño ni tu una chiquilla
al mismo tiempo que gime y suda,
que sea solo un instante es una maravilla.

... nunca más supe de ti...
extraña amiga.

No hay comentarios: